Fuente: Presidencia de la República
El Ministerio de Industria suscribió un convenio con las cuatro firmas de transporte público de pasajeros de Montevideo por 400.000 dólares para apoyar la compra de autobuses impulsados a energía eléctrica. La meta para este año es aumentar la flota en 30 unidades, dijo el titular de la cartera, Guillermo Moncecchi, tras destacar que esa modalidad vehicular es la siguiente revolución en el área energética de Uruguay.
En el marco del proyecto Movés, el ministro de Industria, Energía y Minería, Guillermo Moncecchi, el subsecretario de Medio Ambiente, Jorge Rucks, y el representante residente del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), Stefan Liller, suscribieron este martes 4 un convenio con las cuatro empresas operadoras de transporte público de pasajeros en Montevideo.
El proyecto gubernamental busca impulsar la transición efectiva hacia una movilidad urbana inclusiva, eficiente y de bajas emisiones de carbono en Uruguay, a través de la promoción del transporte público de pasajeros, los modos no motorizados y el uso de vehículos eléctricos. La meta para este año es contar con 30 unidades de este tipo y llegar a los 100 o 120 en 2020.
Para llegar a ese objetivo, el convenio firmado este martes consiste en un apoyo de 100.000 dólares para la compra de ómnibus eléctricos por parte de las empresas Cutcsa, COME, UCOT y COETC. Moncecchi explicó que este apoyo económico se complementa con un subsidio que surge del artículo 349 de la ley n.º 19670, que faculta al Poder Ejecutivo a facilitar la transición inicial hacia tecnologías más eficientes y sostenibles.
La nueva normativa, que se prevé se reglamente en las próximas semanas, promueve la sustitución de hasta el 4 % de la flota de vehículos con motor diésel por otros impulsados con electricidad, mediante un subsidio que cubrirá la diferencia de valores entre uno y otro, que es de unos 260.000 dólares.
Moncecchi informó que, a nivel de los vehículos utilitarios, ya se trabaja con empresas, subsidiando la compra de estos. En referencia a los de uso particular, dijo que su incorporación dependerá de la ecuación de costos, puesto que los eléctricos son más caros por el valor de la batería, pero son más económicos en su uso.
Sostuvo, además, que esta transición hacia la movilidad eléctrica es una forma de aprovechar el cambio que se realizó en la matriz de generación, con el fomento de las fuentes renovables y el desarrollo de la llamada ruta verde, que contará con puntos de carga cada 60 kilómetros y se extenderá para todo el territorio.
Por su parte, Rucks enfatizó que el sector transporte es el mayor emisor de dióxido de carbono (CO2) a la atmósfera, responsable del 50,5 % del total de emisiones de gases de efecto invernadero de Uruguay. Por ello, resaltó que la política de cambio climático atiende especialmente a este sector, para facilitar su transición a una movilidad eléctrica.